Hermanos y hermanas, el mensaje central de la fiesta de los Reyes Magos es claro: la salvación que trae Jesús es para toda la humanidad, sin fronteras. Oremos.

Te damos las gracias por tu hijo Jesús

• Padre bueno, que la Iglesia sea rostro tuyo, presencia tuya, para todos los hombres y mujeres; para todos los pueblos, en especial aquellos que tendemos a no recordar o atender.

Te damos las gracias por tu hijo Jesús

• Padre bueno, que no nos olvidemos que la liberación que tú nos ofreces es para todos, que somos parte de una familia humana más amplia, que hay otras personas y otros pueblos.

Te damos las gracias por tu hijo Jesús

• Padre bueno, te recordamos a todos los hombres y mujeres que han hecho de sus vidas una entrega permanente junto a los más desfavorecidos, trabajando por lograr una vida digna, justa y en paz para todos.

Te damos las gracias por tu hijo Jesús

• Padre bueno, que nuestros niños y jóvenes disfruten con los regalos de los Magos y vivan solidariamente para que todos los niños y niñas de éste mundo tengan también la oportunidad de jugar.

Te damos las gracias por tu hijo Jesús

• Padre bueno, que todos nosotros y nosotras seamos muy conscientes que por encima de lo que somos, de lo que nos sucede y hacemos está tu Amor que nos abre y da un horizonte de esperanza para vivir en positivo.

Te damos las gracias por tu hijo Jesús

Padre bueno, en ésta fiesta en la que nos intercambiamos regalos, que sepamos valorar y agradecer el gran regalo de tu Amor, de tu presencia, de tu entrega a favor nuestro. Te damos las gracias por tu Hijo Jesús.

Vicky Irigaray