Queridos hermanos, en el anonimato más absoluto, en un pesebre, porque no encontraron sitio en la posada, una sencilla mujer da a luz un niño que es el Salvador, el Mesías, el Señor. Esta es la gran noticia de esta noche. Oremos.

Jesús, queremos que nazcas en nuestro corazón

• Que la Iglesia, con su testimonio de vida, nos recuerde que esta noche, que hoy es el momento oportuno en el que Dios se nos ofrece como Buena Noticia, como alegría y paz.

Jesús, queremos que nazcas en nuestro corazón

• Que a todos se nos conceda una mirada contemplativa sobre el Belén, que sepamos acoger el misterio en nosotros porque se nos ofrece en la ternura de un Niño, y se nos ofrece con gratuidad, sencillez y amor.

Jesús, queremos que nazcas en nuestro corazón

• Que todos nosotros vivamos con alegría renovada lo que esta noche celebramos y que nuestra alegría nos lance a ser Buena Noticia que salva, que restaura, que dignifica, que alimenta, que pacifica a toda la humanidad.

Jesús, queremos que nazcas en nuestro corazón

• Que todos los creyentes vivamos con gozo profundo la certeza del amor del Padre que se ha encarnado en el Niño y que, un año más, nos recuerda que nos ama a tope, sin condiciones, gratuitamente, sencillamente…

Jesús, queremos que nazcas en nuestro corazón

Padre bueno, que nuestra alegría la conozca todo el mundo. Concédenos la gracia de celebrar la venida de tu Hijo como si fuera nuestra primera navidad, sin caer en la rutina y el acostumbramiento. Y que lo que esta noche celebramos nos cambie por dentro, nos haga mensajeros de paz y alegría. Gracias por tu hijo Jesús.

Vicky Irigaray